El bypass periférico es un procedimiento quirúrgico que se realiza para restablecer el flujo sanguíneo en las arterias de las piernas o brazos cuando se encuentran bloqueadas, generalmente debido a una enfermedad arterial periférica (EAP). Esta condición ocurre cuando se acumulan depósitos de grasa (placas) en las paredes de las arterias, dificultando el paso de la sangre.
La sangre transporta oxígeno y nutrientes esenciales a los tejidos. Cuando una arteria se bloquea, los músculos y tejidos de las extremidades no reciben el suministro adecuado de sangre, lo que puede provocar:
El bypass periférico consiste en crear una ruta alterna para que la sangre pueda llegar al área afectada, evitando el segmento obstruido. Para ello, el cirujano puede usar:
El injerto se conecta por encima y por debajo de la obstrucción, permitiendo que la sangre fluya con normalidad.
Como toda cirugía, tiene riesgos, como infección, sangrado o formación de coágulos. Sin embargo, en pacientes bien seleccionados, el bypass periférico puede mejorar significativamente la calidad de vida y prevenir complicaciones graves, como la amputación.
Si tienes síntomas de mala circulación o te han hablado de este procedimiento, acude con nosotros para evaluar si es adecuado para ti.
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